domingo, 21 de septiembre de 2008

EL CANON, UN ROBO A MANO ARMADA



Por defecto Editorial Todo Pocket PC: El canon y las tiendas.

El canon de la SGAE es un tema recurrente en mil y una discusiones, pero siempre tratado desde el punto de vista del cliente final y muy pocas veces teniendo en cuenta a los que también salen perjudicados de este abusivo impuesto revolucionario: Las tiendas. Las tiendas somos las encargadas de mediar entre el cliente y la SGAE en el cobro de este canon, al igual que lo es con el cobro del IVA. Es evidente que si Hacienda permitiera vender sin IVA, siendo el cliente el que, finalizada la compra, pagara este impuesto, la morosidad sería insostenible. Así que aceptamos de buena gana ser mediadores en el pago del IVA, ya que la causa en teoría es buena, y porque nos obligan, no hay que olvidarlo. Pero mediar en el canon de la SGAE, ¿Nos sale a cuenta?

Una de las primeras cosas que las tiendas hemos de tener en cuenta es como gestionarlo, ya que muchas, bien de mala fe, o bien por desconocimiento, lo hacemos incorrectamente perjudicando al cliente final. Pongamos por caso que A vende a B una impresora multifuncional, de esas que permiten hacer fotocopias. Esta impresora está penalizada con 18 euros de canon, por los libros que puedas fotocopiarte (ja!). Si a A la impresa le cuesta 300 euros sin IVA y el canon pongamos que 18, y si tiene un margen comercial de un 10%, deberá vender la impresora por 300 euros + 30 de margen comercial, mas los 18 euros de canon. Y especificar claramente en la factura que son 330 de la impresora y 18 de canon. Lo que algunas tiendas hacen es sumar 300 + 18 y aplicarle el margen, con lo cual están vendiendo un bien cuando en realidad son dos: Impresora y canon.

Hay otro hecho que me parece escandaloso y del que curiosamente nunca he visto a nadie reflexionar acerca de ello, que no quiere decir que nadie lo haya hecho. Soy de los que piensa que el canon no debería llamarse canon. En realidad es un producto, como podría ser una libreta, una hamburguesa o un par de zapatos. De la venta de este producto se lucra la SGAE, que a pesar de contener el término Sociedad en sus siglas, no deja de ser una empresa privada. Dicho de otro modo, hay una empresa privada con mucho ánimo de lucro que impone la venta de su producto de forma obligatoria en tiendas y grandes almacenes. De acuerdo Señores de SGAE, yo les distribuyo por obligación sus productos, porque parece ser que desde el Gobierno están de acuerdo y yo soy de los que acato las Leyes. Lo que no me gusta tanto es que me consideréis tan gilipollas como para poner a vuestra disposición mi furgoneta, mi local, mis empleados, mi empresa de mensajería, mi gestor y en definitiva, a toda mi infraestructura, para vender un producto que os lucra, que me genera molestias y del que no veo ni un duro. Si queréis vender canon, vendedlo, pero del cobro y de dar explicaciones al cliente os encargáis vosotros. No me uséis a mi para vuestros negocios. Y si lo hacéis, consideradme un asociado más en vuestra organización y hacedme partícipe de vuestras ganancias. Creo que no pido tanto.

Pero es que no se están aprovechando sólo de forma absolutamente gratuita de la infraestructura que tanto nos ha costado levantar, sino que además la obligatoriedad de distribuir el producto de la SGAE hace perder ventas. Sobre un portátil el canon podría considerarse irrisorio, 3,4 euros por la unidad grabadora, pero sobre una bobina de DVD, el precio del canon es, desde hace tiempo, superior al producto vendido. Imaginad por un momento la indignación del tendero que debe pagar anticipadamente el canon (venda o no los DVD) para después ver como la clientela, con buen criterio, va a comprar los DVD a mercadillos ambulantes o a Portugal por Internet para ahorrarse este injusto gravamen.

Un punto que hay que dejar claro es que la SGAE no defiende a las Hermanitas de la Caridad de los Huérfanos Desamparados. Defiende a Autores y Editores, gente que ni son altruistas, ni son una buena causa, ni es un bien de primera necesidad para nuestra sociedad. Son gente como toda la demás, que deben trabajar para ganarse la vida (entendamos trabajar como organizar conciertos en los que sudar la camiseta). Con una diferencia. A las tiendas de bolsos no las indemnizan si a 100 metros hay un africano vendiendo imitaciones. A los músicos si. Pero es que los indemnizan tanto si hay un africano vendiendo bolsos falsos como si no. ¿Tan buena es la música española como para que tengamos que defenderla pagando estas millonadas? ¿Alguien se dará cuenta algún día de la problemática que conlleva aplicar canon indiscriminadamente a tantos y tantos productos? ¿Porqué desde el Gobierno, sea del color que sea, se ha defendido siempre al sector profesional de los músicos y a otros, como el sector del comercio minorista, se los ha ninguneado y discriminado constante y deliberadamente? ¿Qué tiene un músico como para que se le defienda su sueldo por Ley, que no tenga yo?

Creo sinceramente que el canon no debería existir. Creo que la música no se debería considerar cultura, sino entretenimiento (Como alguien me diga que Bustamante, Bisbal o Ramoncín sean cultura lo arreo). Los músicos deberían regalar sus canciones y ganarse el sueldo en los conciertos. Pero es que claro, eso conlleva trabajar más de lo deseable y además, visto el nivel musical existente actualmente en España, sólo dos o tres podrían seguir viviendo de su guitarra, con lo cual el gran negocio de la industria musical iría al traste. Así que, a pesar que los consumidores tenemos claro cómo y de qué forma queremos consumir canciones, hay muchos Gobiernos, no solo el nuestro, que prefieren mantener por Decreto Ley una forma de entender la música totalmente caduca y sentenciada a muerte. Tengo claro que por muchos párrafos que se escriban, por muchas reclamaciones que se hagan, eso no parece que vaya a cambiar. Así que el único fin que puede estar persiguiendo este texto sea el de meter dentro del debate del canon de la SGAE a las tiendas, esas gran perjudicadas y a la vez, olvidadas.
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